La tensión entre el sindicato de la Unión Tranviaria Automotor (UTA) y las empresas de transporte público en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) ha alcanzado un punto crítico, lo que podría desencadenar en un paro de colectivos. El conflicto surge ante la falta de acuerdo en las negociaciones salariales entre ambas partes.
El sindicato de UTA ha exigido un aumento salarial del 34% para los conductores de transporte, lo que elevaría el salario básico a 987.000 pesos, en comparación con el sueldo de febrero.
Sin embargo, las empresas argumentan que solo pueden pagar $737.000, manteniendo el mismo salario que en el mes anterior. Este desacuerdo se agrava aún más debido a que el cálculo de los subsidios gubernamentales se basó en el salario de febrero, sin considerar el incremento solicitado por el sindicato.
Según Luciano Fusaro, vicepresidente de la Asociación Argentina de Empresas de Transporte Automotor (AAETA), una de las cámaras que negocian paritarias con UTA, la situación se complica porque el convenio salarial aún no ha sido firmado. Aunque se estableció un acuerdo preliminar para aumentar el salario en marzo, dicho convenio no fue rubricado oficialmente.
Ante este escenario, UTA ha anunciado un estado de alerta y ha advertido a la población sobre la posibilidad de un paro de colectivos a partir del próximo lunes 8 de abril si no se resuelve el conflicto salarial.
Esta medida afectaría la normal prestación del servicio en el AMBA, lo que podría generar importantes inconvenientes para los usuarios del transporte público en la región