Cada año se registran aproximadamente 700.000 casos alrededor de todo el mundo, y la mayoría pueden prevenirse.
Cada 10 de septiembre se conmemora el «Día Mundial para la Prevención del Suicidio», una iniciativa que planteó la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde 2003. Esta fecha busca generar conciencia y fomentar acciones concretas para prevenir el suicidio, una de las principales causas de muerte a nivel global. Según la OMS, el suicidio es la cuarta causa de muerte entre personas de entre 15 y 19 años, con aproximadamente 700.000 suicidios registrados cada año en todo el mundo.
Lo alarmante de las cifras es que la mayoría de los suicidios son prevenibles. La Organización establece que casi el 77% de los suicidios ocurren en países de ingresos bajos y medios (PIBM) y cada suicidio afecta a las familias y comunidades, tanto como en las personas que intentaron suicidarse o tienen ideas suicidas graves.
Situación en Argentina
En Argentina, el suicidio se convirtió en una realidad preocupante. Un informe de UNICEF indica que el país enfrenta amplias tasas de suicidios, especialmente entre los jóvenes. En el rango de edad de 15 a 19 años, el suicidio es la segunda causa de muerte, con una tasa de mortalidad de 12,7 por cada 100.000 habitantes. Los casos alcanzan una mayor cantidad de decesos de varones, que de mujeres lo que significa que existe una “connotación sexo-genérica diferencia”.
Desde principios de la década de 1990, la mortalidad por suicidio en adolescentes argentinos se triplicó. Los varones tienen aproximadamente tres veces más posibilidades de suicidarse en comparación con las mujeres.
Entre los principales factores que contribuyen al suicidio, se encuentran:
- Género
- Autoexigencia, exigencia parental y/o fracasos en logros esperados
- Factores intrapsíquicos y de personalidad, particularmente los estados depresivos,
- Problemas socioeconómicos y culturales, como la falta de expectativas laborales y de estudio,
- Las perturbaciones en la vida familiar, abuso sexual y orientación sexual.
Por eso, en el Mes de Prevención del Suicidio en septiembre es el momento para promover asistencia en salud mental, educar a la sociedad sobre los signos de alerta, mejorar el acceso a la atención y tratamiento para quienes enfrentan problemas de salud mental y fomentar redes de apoyo que puedan ayudar a prevenir el suicidio y brindar asistencia a quienes están en riesgo.