EN RADIO BÚNKER, LORENA GERVASI, MADRE DE DAMIÁN DI BELLA, CONTÓ COMO SE ESTA LA SALUD DE SU HIJO

Damián Di Bella, el joven de Merlo que luchó por su vida luego de ser baleado por el novio de su amiga, recibió el alta hace unos días y se encuentra en rehabilitación. Su madre, Lorena Gervasi, habló en el “Tanke de Búnker” sobre su estado de salud.

“No está en casa, desde el miércoles pasado se encuentra en el Instituto de Rehabilitación Psicofísica, en Capital. Estuvo cinco días en casa, disfrutando un par de mimos, y el martes lo internaron”, contó.

“Él es un chico muy alegre, muy positivo. Ya tiene en la cabeza que en unos meses va a salir a caminar para hacer sus cosas diarias. Siempre fue positivo en todo, esto es una cosa más”, indicó con respecto al estado de ánima y la salud de su hijo.

Lorena, afirmó que además de pelear por su vida, Damián tuvo que cursar en dos ocasiones el coronavirus dentro del hospital. “No tuvo problemas respiratorios, tiene los pulmones muy fuertes, es una persona sana. Tiene mucho deporte. El Covid lo pasó como si nada”, dijo.

Volviendo al tema de la recuperación, explicó que tipo de rehabilitación realiza: “Es todo mental y físico lo que está haciendo”.

Por otra parte, detalló como se encuentra la parte judicial: “La causa la está llevando Oviedo, el fiscal. Aparentemente, él (Jaime) ya está en una penitenciaría. Hay que esperar el juicio, ya llamaron a varios testigos para declarar. Por suerte los vecinos están ayudando, quieren que se haga justicia. Yo creo que el año que viene, tiene que empezar el juicio”.

“Después de todas las marchas, los pedidos por televisión y de buscarlo, se entregó. Tuvo que hacerse muy viral todo, como para que lo encontraran”, agregó.

Su amiga, a quien le dio un “me gusta” en la foto y derivó en la reacción de su agresor, no se habría acercado en ningún momento, afirmó: “Ni ella, ni la familia, ni los familiares del autor se comunicaron con nosotros”.

Recordando aquella noche trágica, Gervasi señaló que el arma utilizada para cometer el delito no fue encontrada. “Tuvo dos o tres días para esconderla”, completó.

Más tarde contó como vivió la estadía en el centro de salud donde estuvo internado su hijo: “Fue buena, tuve un rose con un jefe de piso de terapia intensiva, que salió por todos lados. Lo denuncié públicamente. Aparte de eso, fue bueno. Cuando se recuperó del Covid, fui a darle de comer durante dos meses. Después lo pasaron a piso, estábamos 24 horas con él”.

En el mismo sentido, aseguró que en rehabilitación: “Tiene para mínimo seis meses más. Con la complejidad que tiene, debe quedarse allá”.